jueves, 3 de noviembre de 2011

¿Siempre será así? (Cap 4/23)

Tarde pero bueno auí todavái es tres de noviembre -las nueve de la noche pero ewé todavái 3 de noviembre.
Esta ocacion TegoMass dio doble concierto, es decir ahbra doble caí.
Sin embargo amí se me secan las ideas o me adelanto mucho en la hisoria con dos capis, así que tengo dos opciones de las cuales necesito su ayuda -ya tengo una opinión- pero igual me gustaría saber que piensan otras lectoras:
La cosa es esta: TegoMass en 4 ocaciones *contando esta*, dará  doble concierto, hoy coincidió con el cumple de Ryo-chan así que traigo algo de Ryo-chan.
Entonces mi cuestión es esta:

1.-Hago los 4 especiales con la pareja que incluye a Ryo-chan ó
2.-Hago cada especial con una pareja distinta... (la de Ryo, Pin, KoKame y MaruDa)

¿Ustedes que piensan?

Mientras lo piensan les dejo el capi 4~!



Capítulo 4

No me ocupé más del lo caballos, la persona más cercana a mí estaba sangrando de su brazo,  y me era totalmente imposible saber con qué rayos se había lastimado así, estábamos tirados en el suelo, prácticamente uno sobre el otro, él sobre de mí, lo tenía aferrado contra mí, seguía asustado y con la respiración agitada, sus ojos estaban cerrados todavía, lo tranquilicé con unas pocas palabras y poco a poco ambos nos sentamos en el pasto, iba a tomar su brazo que sangraba para ver y examinar su herida, sin embargo, me la retiro bruscamente en cuanto vio mis intenciones.

-¡No me toques!, jamás, ¡Nuca me toques cuando sangre!

Tenía furia y miedo en los ojos al mismo tiempo, yo nuevamente estaba contrariado, su cara expresaba dolor e intenté acercarme de nuevo a él, sin embargo el resultado fue el mismo, pero aún más brusco y rápido, sin embargo le dolía.

-Massu, yo lo siento… ¿Tú no… estas herido… verdad?

-No, no tengo absolutamente nada, ¿Me dejas revisarte?

Dudó, apartó su mirada hacia su brazo y luego hacía a mí, no sabía que hacer, pero al fin me tendió su brazo, con una voz clara, tranquila pero sumamente seria se dirigió hacia mí, tendiéndome con cuidado su brazo:

-Sólo no toques la sangre…

-¿Qué me podría pasar?

-Hum, no es el momento ni el lugar adecuado para contártelo…

-De acuerdo… ¿con qué te lastimaste? Caíste encima de mí.

-No lo sé, mi piel es demasiado sensible… -Habló con claridad al principio pero luego su voz se fue apagando, terminado de contestar en un susurro y bajando su rostro.

No tenía nada de que preocuparse demasiado, sólo era una herida superficial, pero muy larga, ocupaba todo su antebrazo, y aunque no fuese grave si que lo aparentaba, y claro asustaría a cualquiera que lo viese, lo levanté y le propuse ir a por nuestras cosas para luego ir a con un doctor para que lo examinase y estuviésemos totalmente seguros de que no era nada grave en realidad, estuvimos ambos de acuerdo y emprendimos el regreso.

Con los caballos fue algo muy rápido llegar a donde estábamos y donde ocurrió todo, pero en realidad era una larga distancia que, no cualquiera recorrería tranquilamente, yo obviamente estaba acostumbrado a ese recorrido, pues como fuese de eso se trataba mi trabajo ahí, sin embargo, tras unos cuantos minutos comprendí que, una persona normal y menos aún en las condiciones actuales de Tegoshi, podría soportarlo, pues debido al reciente susto, la herida que tenía, el fuerte sol, la distancia a recorrer, junto con el tipo de terreno que no era nada cómodo para andar, y tampoco para descansar.

Le ofrecí entonces que subiera a mi espalda:

-¿¡EH?!, ¡No!, te cansarás mucho, además yo puedo…

-No puedes andar bien por más tiempo, tu herida esta abierta, el sol esta muy fuerte tu…

-No es de profundidad, es sólo superficial, ¡Estoy bien!

-Algo debe estar mal, ya no debería de sangrar ¿No te parece?

-¡No! ¿Tú qué sabes de cómo reacciona mi cuerpo? ¿Y que tal si así reacciono yo? ¿Estas estudiando medicina como para decir qué es normal y que no?

-No es eso… yo… sólo estoy preocupado por ti.

Calló, cerró sus ojos y bajo su cabeza, debatí consigo mismo… estaba por decirme algo y calló de rodillas.

-¿Estas bien? –Yo estaba muy alarmado, nada de su conducta era normal.

-Yo… no lo creo, lo siento Massu… no quería decirte eso, ni expresarme así…lo lamento mucho, ayúdame… por favor, te lo ruego, lo siento…

Lloraba ¿Qué rayos le pasaba?, no iba a perder tiempo respondiéndome esa pregunta ahora, lo  subí a mi espalda, el seguí diciendo que lo sentía mientras lloraba, y puede que yo le dijese que estaba todo bien, el simplemente lo negaba y se volvía a disculpar entre unos cuantos sollozos, yo simplemente no lo lograba entender, sine embargo eso ahora no era lo verdaderamente importante, ni lo prioritario.

Faltaba ya muy poco para llegar al establo, ahí descansaría un poco, tomaría mis cosas y nos iríamos al hospital más cercano tan rápido como pudiésemos, más nunca  conté con que hubiera gente en el establo.

Al entrar no me di cuenta de la presencia de nadie, dejé con cuidado a Tegoshi en una silla, en lo que yo me apresuraba a buscar todas mis cosas y las de él, sin embargo me detuve al escuchar la voz de Tegoshi acompañada de dos voces más:

-Eso no se ve nada bien –decía uno de los dos, era moreno, delgado, de cabello negro algo largo, vestía con la típica ropa de gente rica para cabalgar, tenía un lunar debajo de los labios, se le podría considerar un chico muy guapo, el pertenecía a la universidad.

-Es verdad, chico ¿cómo te hiciste eso? –lo dijo el otro chico, este era de un tono de piel más claro que el otro que lo acompañaba, también era delgado y vestía como el otro, tenía su cabello negro pero corto y peinado hacia arriba, tenía la misma estatura que el otro, también era de la Universidad.

-Un accidente de caballo –decía Tegoshi.

-Wow, pues te fue bien ¿No?, pudiste haberte roto un hueso –dijo el de piel más clara.

-Alguien muy amable evitó que eso me pasase –Tegoshi sonrió feliz cuando dijo eso.

-¿Tu novia?

-No, pero alguien casi igual de importante

-Hum, ¿Y donde esta esa persona, que te dejo aquí en este lugar?

-Aquí mismo, trabaja en este lugar, fue a buscar nuestras cosas para llevarme ver a un doctor para que me examine.

-Ya veo, bueno chico yo soy Shigeaki Kato, y este de aquí es Nishikido Ryo.

-Un gusto, yo me llamo Tegoshi Yuya.

Decidí interferir de una vez, pero ya viéndolos más de cerca me di cuenta de que eran unos de los cuatro chicos que frecuentaban el lugar, al parecer llevaban un rato esperando a alguien que trabajase ahí.

Recordé entonces que el caballo favorito de quien se llamaba Nishikido era Sagi, y el del otro chico era el que yo tomé para ayudar a Tegoshi, Ao, ellos seguramente querrían usar a sus caballos predilectos… pero Tegoshi… necesitaba atención médica.

-¡Massu! ¿Tienes ya tus cosas? -¿cómo le hacía para recuperarse así de rápido?, pues pese a que su brazo no mostraba mejoría, en definitiva su estado de ánimo si que mejoraba.

-¿Massu?, ¿así te llamas? –a los dos chicos les hizo mucha gracia mi mote…

-Soy Takahisa Masuda pero…

-¡Yo le puse Massu!

Les expliqué a los chicos lo que nos sucedió y sorpresivamente se mostraron muy comprensivos, así que me apresuré a llevarme a Tegoshi de ahí, lo subí nuevamente a mi espalda y nos fuimos directamente a buscar un médico.


2 comentarios:

  1. ¿Qué tiene Tego?¿Por qué se pone así de loco?

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  2. aaaaaaaaaa tego que tienes? tu estado mental acaso es malo? jajaja

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